Luken (II).

 Acabo de descubrir, o darme cuenta ahora (18h 30m 16-09-2024), de que estoy un tanto tontaina al haber confundido mis propios comentarios de respuesta con el único que escribió mi muy estimada Luken, el 2-07-2024; circunstancia ésta, o sea, hace 2 meses y pico ya respondí. [Que ridículo me siento. Ay, la vejez..., pero bueno, a lo hecho o sucedido, pecho.. <¿Vd. pecha con red o con caña (o coña)?>]); me escribió un comentario en esta mie..., bueno en este blog, hace todo ese tiempo.

Mi muy admirada Luken (por el carácter que te percibo. Solida, segura, con fuerza), espero llegues a entender que tras 13 y un cuarto de años (13,25), naide ha hecho comentarios. Cuando me meto en él (blog, quien es el dueño, yo solo su sirviente), en plan webmaster, me lio a lanzar rollos (cualquier lector visitante calificará por si mismo según lea si las entradas que publico lo son o no -rollos-). La cuestión es que no presto demasiada atención a esas partes del blog, los comentarios. Entre otras cosas por lo que he dicho en 13 y pico años, cualquier visitante no ha hecho ninguno. Han sido miles (los visitantes), aunque también es cierto que pido que no se hagan si son inocuos. Pero al ver el tuyo, joooo, me ha emocionado.

Hoy, en el momento que he citado, he visto tu comentario (que agradezco enormemente, por su finura y buen gusto). Como no dispongo de otro canal por el que comunicarme contigo, puesto que abandonaste el FoE, intento con esta entrada volver a contactar contigo.

Y si vuelves por aquí, te vas a sorprender de lo que tengo guardado y a continuación te muestro:

{En unos minutos volverá la transmisión. Me falta montar una imagen}.

¡Ya está!. Aquí la dejo.

Espero te guste. Y si en algo te molesta, adviértemelo, eliminaré la entrada ipso-facto..., cuando descubra tu comentario comentándomelo al cabo de algunos días, bueno, o semanas, bueno, o meses, bueno o años, bueno o... (me parece que más allá de una década, no se, no se,,,, cuando me de cuenta de ello. Como ahora ha ocurrido).

Ciberabrazotes como solemos escribir en este cibermundo, y un ciberbeso, en la mejilla, de amigo.

Como se suele decir, cuídate (aunque yo sea el primero que no lo hago).

Recibe mis cibersaludos más cordiales, apreciada Luken.

PD: "Siempre nos quedará París" o "Hasta el infinito y más allá".